Dejen a los magufos en paz

Algo que siempre me ha gustado pensar es que la magufería, el hecho de que la gente crea en técnicas o pseudociencias que no se sustentan de ninguna manera, era un tipo de selección natural derivada de la ignorancia o el qué sé yo. Leí un rumor el otro día que decía que el recientemente fallecido Steve Jobs había recurrido a métodos alternativos para tratar su cáncer antes que a la medicina. El resultado ya lo conocemos, y es a todas luces, un ejemplo perfecto de selección natural.

Me parece bien que se denuncien ciertos productos o tratamientos que venden como algo científico añadiendo un montón de jerga pseudotécnica que impresiona al público. Todos recordamos el caso de las L. Casei Inmunitas de los Actimeles o los hologramas mágicos de las Power Balance. Y repito, que se denuncie, se avise porque no todo el mundo tiene unos conocimientos de ciencia más o menos variados, decirles »no te lo creas que es mierda a precio de oro». Pero no tocar las narices por todo internet, radio y tele; eso es afán de llamar la atención, pesados.

¿A qué se debe principalmente tan alto nivel de magufería? A que la gente no usa la duda metódica, algo que deberías aprender bastante bien desde pequeño con los anuncios de jugetes ¿Quién no ha pedido un juguete que en el anuncio era la repanocha y luego era una mierda que hacía tres cosas? A todos nos ha pasado, pero por lo visto, como consumidores no aprendemos. Hay un montón de gente que dice »eso dicen y luego es mentira» pero no lo aplican a la hora de hacer un criterio de selección, así como consumidores, ellos tienen tanta culpa como el anunciante por hacer publicidad engañosa.

Sí, hay otros factores que fomentan la magufería: ser perroflauta y enseñar biodanza en medio de Argüelles, provenir de un entorno de magufos (familia del Opus, familia de veganos anti-wifi, etc.) o desconocer todo tipo de base científica, ser algo borrego e ir donde los demás señalan.

Conclusión: dejen a los magufos en paz, que la gente crea lo que le de la gana, porque si creen es porque no les alcanza para razonar.

Publicidad hasta la muerte

Hace una semana que murió Steve Jobs. El mundo quedó conmocionado por la pérdida de un genio. La red se llenó de alabanzas, todo el mundo le quería, homenajes. Salió en todos los medios de comunicación, desde blogs pequeños hasta portadas de periódicos, se abrían telediarios con ello. Todo por la muerte del cofundador de una de las compañías más grandes actualmente.

Una semana después nos enteramos de que Dennis Ritchie ha muerto. ¿Quién era ese? ¿Alguien conocido? Sí, el co-creador de Unix y el creador del lenguaje C. Pero eso no es bonito, eso no tiene un logo distintivo, eso no vende. Por lo tanto, sus creaciones no han tenido ninguna repercusión, no han supuesto una revolución informática como fueron los Macs o los iPhones. No tendrá a todos los blogs escribiendo media docena de entradas sobre su obra y milagro, ni habrá palabras de presidentes en su honor, o de famosos comparándole con algún inventor. La gente no se pondrá su foto ni su logo como avatar o firma. Tampoco irán a poner velas o flores delante de… ¿alguna tienda de Unix?

Que se magnifique los dispositivos de Apple y se olvide que desde hace años se basan en Unix, es lo normal. Que más da quién crease Unix, no lo puso en una caja bonita, ni supo hacerlo de aluminio. Y esto seguirá pasando en un futuro. Ya se mencionaba a Jobs como fundador de Apple, dejándo de lado a la otra mitad. Y volverá a pasar cuando Bill Gates muera y se diga que él inventó los PC’s.